Edición:
Periférica, 2017 (trad. Laura Salas Rodríguez)
Páginas:
136
ISBN:
9788416291564
Precio:
15,00 €
He
aquí un libro extraño y sugerente: En el río del amor (1922), la primera
novela del francés Joseph Delteil (1894-1978), escritor prolífico que cultivó
sobre todo la poesía y cuya obra permanecía inédita hasta ahora en castellano. Esta
ópera prima, precisamente, recibió elogios de André Breton y Louis Aragon, y si
despertó el interés de estos autores es, por supuesto, por su naturaleza
vanguardista. La historia, si se puede llamar historia, gira alrededor de un
peculiar triángulo amoroso que, en
plena Revolución rusa, mueve a los personajes de Siberia hasta Shanghái. Por
una parte está Ludmila, una joven criada cerca del río Amur (juego de
palabras con «amor», amour en
francés), que desde muy temprana edad hizo demostraciones de su fuerte valor y
temperamento, y se ha convertido en comandante de un ejército de mujeres
zaristas. Por la otra, dos oficiales del Ejército Rojo, Borís y Nicolái, dos
amigos que lo hacen todo juntos, que lo comparten todo, como si fueran hermanos. Y, juntos,
se enamoran de Ludmila y desertan por ella. Solo que Ludmila no se deja
compartir; ella elige a uno. El rechazo no le sienta bien al otro, claro.
Explicado
de este modo puede llevar a engaño, porque el enredo es lo de menos en este
libro. Más bien se trata de la dirección, la brújula que marca el curso de la
narración; en su desarrollo, lo fundamental está en las imágenes singulares y
evocadoras que retrata el autor a lo largo de este romance de alto voltaje.
Descompone la historia en planos, uno por episodio, como si tomara una escena y
la ampliara con una lupa para mostrarla con ese matiz de distorsión, de
irrealidad, de los objetos aumentados. Este fenómeno sucede con Ludmila, la
heroína, que no se representa como una mujer humana cualquiera, sino como un mito, un mito
de valentía y arrojo, un mito de seducción suprema y aniquilación, que arrastra
a los dos amigos hacia un devenir incierto. Ellos se dejan llevar, impulsados por
la fuerza de Ludmila, aunque les cueste la vida. Esta es una novela sobre una fascinación que conduce a la tragedia,
una novela en la que la pulsión amorosa se funde con la pulsión de la muerte; pasión
intensa sobre un fondo insinuante.
Joseph Delteil |
El río del amor
tiene, además, el orientalismo
característico de la literatura vanguardista y de las novelas coloniales que por
aquel entonces estaban de moda. Este relato, que conjuga el amor
con las aventuras por un territorio desconocido, lleva a los personajes a
Shanghái y más tarde a Pekín: descripciones esplendorosas, con una adjetivación
rica, metáforas grotescas e imágenes sugestivas. En el lenguaje de Delteil hay
poesía y una imaginería poderosa que reviste estas páginas de un halo de fantasía,
pero no como una fábula inocente, porque posee una dosis importante de erotismo y perversidad. Es más: el
erotismo y la perversidad son dos elementos básicos de la obra. Algunas
escenas, como el retrato inicial de la Ludmila niña, tienen un lado macabro que
se plasma sin atenuantes. Se trata, en fin, de una novela tan distinta a lo que
se escribe en la actualidad que la sola experiencia de leerla (y de adentrarse en
otro universo creativo) ya resulta placentero. Literatura experimental en
estado puro, urgente, rabiosa, con esas mezclas imposibles que sin embargo dan
forma a una creación esmerada y pintoresca. Bien, muy bien.
Pues habrá que probar con este libro.
ResponderEliminarBesotes!!!
Ya me contarás si te animas.
EliminarMe llama la atención (y me encanta la portada). Voy a darme una vuelta por aquí.
ResponderEliminarA mí también. Periférica cuida los detalles.
EliminarBastante interesante.
ResponderEliminarLo es, lo es.
EliminarMe encanta cómo nos hace entender el ambiente en ese modo poético, y aunque en esa época los personajes no eran tan estéticamente "bellos" nos hace hasta exitarnos por ellos.
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