11 marzo 2013

35 kilos de esperanza - Anna Gavalda



Edición: Alfaguara, 2004
Páginas: 96
ISBN: 9788420400471
Precio: 7,50 €

Publicado por primera vez en 2002, 35 kilos de esperanza es hasta el momento el único libro infantil de la periodista y escritora francesa Anna Gavalda (Boulogne-Billancourt, París, 1970), conocida por el éxito internacional que han tenido sus novelas Juntos, nada más (2004) y La amaba (2002), además del libro de relatos Quisiera que alguien me esperara en algún lugar (1999), con el que debutó en el mundo literario. La autora, que es madre de dos hijos y durante un tiempo trabajó como maestra, explica que el protagonista de 35 kilos de esperanza está inspirado en un alumno que tuvo, un muchacho nulo para los estudios pero con una gran habilidad para las manualidades. «El sistema educativo francés menosprecia a los (estudiantes) fantasiosos, los curiosos, los poetas, los diferentes», explica en esta entrevista, «Afortunadamente, hay profesores maravillosos, aquí y allá, que salvan vidas». En un principio, 35 kilos de esperanza fue un relato que Gavalda escribió por encargo para una revista, pero más tarde amplió el texto y lo convirtió en esta novela.

Grégoire tiene trece años y detesta la escuela. Él mismo narra en primera persona cómo empezar a ir a clase le cambió (para mal) la vida: ha repetido curso dos veces, no le gusta estudiar, se le dan mal los deportes y sus desastrosas notas son motivo de discusión entre sus padres. El único que parece creer en él es su abuelo Léon, con quien comparte su fascinación por el bricolaje, porque otra cosa no, pero Grégoire es un auténtico manitas y disfruta como nadie con las manualidades. El abuelo intenta hacerle entender que para llegar a hacer inventos resulta necesario que aprenda matemáticas, lengua y el resto de materias, aunque él sigue igual. Sin embargo, cuando el anciano cae enfermo y los padres de Grégoire le advierten sobre la posibilidad de matricularlo en un internado, tal vez llegue el momento en el que, por fin, encuentre la motivación para demostrar que hay esperanza en sus treinta y cinco kilos de peso.

35 kilos de esperanza es una buena novela, una obra bonita y sencilla que transmite valores sin adoptar un tono moralizante. Aunque la sinopsis pueda parecer un canto a las bondades del colegio, la autora no pretende adoctrinar al lector, sino plasmar los puntos fuertes y débiles de esta institución (por ejemplo, mediante una profesora que comprende a Grégoire y estimula su creatividad) y hacer entender que para labrarse un futuro no solo hace falta tener una habilidad, también se debe complementar con otras disciplinas para poder llevarla a cabo con eficiencia. En el caso de Grégoire son los inventos, para los que el abuelo le enseña que debe saber matemáticas y lengua, pero se puede inculcar lo mismo a cualquier niño. La historia es perfecta para que los lectores se lo pasen bien con ella y luego, si los padres quieren, puedan comentarla con ellos. La editorial ofrece una guía de actividades que puede servir como orientación.

En general, el libro lo tiene todo para conectar con los lectores a los que se dirige: un protagonista simpático con el que se pueden identificar, una situación realista y algunas notas de humor. Grégoire, narrador en primera persona, se expresa de forma natural y espontánea, como lo haría cualquier niño de su edad. Todo el texto corresponde a sus pensamientos; apenas se desarrollan las escenas, pero no hace falta porque a través de los ojos de Grégoire se conoce lo suficiente para comprender su situación. El otro personaje destacable, Léon, cumple con su papel de abuelo entrañable que a la vez impone respeto a su nieto. Las relaciones familiares son un tema importante, no solo la de ellos, puesto que también se puede sacar jugo a la de los padres del niño. En este sentido, resulta acertada la moraleja de que Grégoire no debe sentirse culpable por sus discusiones, ya que hay problemas que solo son cosa de los adultos y se darían igual aunque él fuera un buen estudiante. Por último, una mención al trato del protagonista con sus compañeros de clase, una relación que cambia con el tiempo y que, como todo lo demás, es muy próxima a la realidad.

Anna Gavalda.
En conclusión, 35 kilos de esperanza es una novela breve, agradable y cercana que plantea una situación que tiene más sustancia de la que aparenta, con temas tan interesantes como la infravaloración de las actividades artísticas por parte del colegio, la necesidad de encontrar una motivación, la toma de conciencia de que aquello que no nos gusta a veces también es necesario y diversas cuestiones del ambiente familiar. No obstante, sería un error valorarla solamente por su fondo, dado que la forma, ese lenguaje tan expresivo, sincero y desenfado de Grégoire, es sin duda otra de sus claves. La editorial lo recomienda para niños a partir de 10 años, pero si sois adultos que, como yo, habéis disfrutado del resto de obras de Anna Gavalda y os habéis enamorado del encanto de su prosa, os animo a descubrirla en esta otra faceta porque seguro que no os defraudará.

Nota: la edición de Alfaguara está ilustrada por Ximena Maier. No puedo hablaros de su trabajo porque he leído el libro en la edición francesa de Bayard Jeunesse, que no contiene dibujos.

12 comentarios :

  1. Pues te voy a hacer caso y lo leeré porque me gusta muchísimo la sensibilidad de esta autora para escribir y para dotar de un aire diferente a lo cotidiano. He leído todos sus libros y el único que me dejó un tanto decepcionado fue "Quisiera que alguien me esperara en algún lugar", aunque también es cierto que me suele suceder con todos los libros de relatos.

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  2. Me gusta mucha esta autora, y la verdad es que no tenía ni idea de que hubiese escrito nada para niños, me lo apunto!! Bss

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  3. Leí uno suyo y no me entusiasmó, así que estoy en una fase de no leer nada hasta que me pase...
    Un saludo!!

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  4. @Manuela. A mí sí que me gustó, aunque tampoco soy de relatos. "35 kilos de esperanza" es muy cortito, pero espero que te guste más.

    @Matiba. Normal: es un libro muy poco conocido, y como ya tiene unos añitos... Yo lo descubrí porque me gusta la autora; de otra forma no le habría prestado atención.

    @Pinkiland. ¿Qué libro era? A mí hay algunas novelas de Anna Gavalda que no me gustaron nada, pero aun así me encanta su forma de escribir.

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  5. Yo tengo apuntada la novela Juntos, nada más gracias a ti , pero todavía no me he hecho con ella así que empezaré por ahí.
    1beso:)

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  6. @Elena:). Sí, mejor que empieces a leer a la autora con "Juntos, nada más". Me parece su mejor novela.

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  7. No conocía esta faceta de Gavalda. Pues me llevo el libro apuntado para compartir lectura con mi hija, a ver si nos gusta a las dos.
    Besotes!!!

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  8. No sabía que Anna Gavalda tuviera alguna novela dirigida a un público más juvenil, aunque eso no impida que los que ya tenemos algún añito más lo leamos. Me gusta el tema. Creo que podría resultar interesante para un club de lectura como en el que está mi hijo ahora en el instituto. Lectores de 12 a 15 años.
    Creo que si lo veo en algún momento lo compraré, aunque aún tengo pendiente en casa una lectura de esta autora: "El consuelo".
    Un beso

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  9. Hola Rusta,
    He leído la reseña y me has convencido. Pero no voy a leer el que acabas de reseñar. Hacía tiempo que quería leer algún libro en francés y acabo de pujar en ebay por dos libros de la autora, traducidos como "Juntos, nada más" y "Quisiera que alguien me esperara en algún lugar".
    Hasta el momento tus recomendaciones han resultado positivas (salvo una de ellos, ya te diré cual). Espero que esta autora no me defraude.
    Saludos

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  10. @Margari. Espero que lo disfrutéis las dos :).

    @Bookworm. Quizá es un pelín infantil para lectores de entre 12-15 años. Lo veo más cerca de la rama infantil que de la juvenil.

    Sobre "El consuelo", a mí me decepcionó un poco. No es una mala novela, pero me resultó confusa en algunos tramos y se me hizo lenta.

    @Francisco. Pues no sé si Anna Gavalda te gustará. Tengo la sensación de que es una autora que gusta más a las mujeres que a los hombres, por los temas que trata y por su sensibilidad. De todas formas, ya me contarás qué te parece.

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  11. Está claro que no hay un único camino en esta vida :).

    ¡Me ha sorprendido que Gavalda haya escrito LIJ!

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  12. @Alba Úriz. Creo que lo sabe muy poca gente. Y mal no se le da; podría haber seguido con libros de este tipo.

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