Páginas: 496
ISBN: 9781595143662
Precio: 7,24€ en Bookdepository
¿Cansados de las criaturas fantásticas bondadosas, las tramas de acción previsibles y las prosas del montón? Bienvenidos a Vampire Academy, una saga de vampiros diferente a lo que se publica actualmente, mucho más elaborada y con ingredientes deliciosos: hay varias razas de vampiros, unas buenas y otra terrible; los personajes están muy bien caracterizados, resultan tan creíbles y cercanos que parecen amigos tuyos; la protagonista es una chica fuerte que lucha por lo que quiere, no se parece en nada a las pavisosas que tanto abundan en el género; aunque hay amor, contiene grandes dosis de aventuras y tensión que atrapan al lector; finalmente, Richelle Mead es muy hábil en la narración, con un estilo fresco y ágil que denota mucha más pericia que otras autoras del género. Así es, a grandes rasgos, esta fabulosa saga.
Spirit bound (sin spoilers)
El final de Blood promise nos dejó con un descubrimiento que puede cambiar el rumbo de la saga de forma radical; no obstante, es un poco difícil ponerlo en práctica cuando alguien quiere acabar con tu vida. Rose Hathaway, nuestra dhampir protagonista, lo sabe muy bien: después de su aventura por tierras rusas ha regresado a la academia y está a punto de graduarse para poder ejercer al fin como guardiana de su mejor amiga Lissa. Cuando terminan los exámenes, el grupo se traslada a la corte, donde residirán hasta que se conozcan sus asignaciones. Todo parece normal, incluso la reina Tatiana se muestra más agradable que nunca, pero no hay que olvidar que los viajes al exterior pueden exponerlos a los malvados strigoi… Aunque, quien sabe, tal vez a los chicos les conviene tentar al peligro. ¿Conseguirán salir bien parados?
Impresiones
Después de esta m***** de sinopsis que lo dice todo y no dice nada, me veo en la obligación de escribir una crítica decente para que a pesar de todo el libro os llame la atención. Porque tiene que llamaros la atención (no a todos, claro, pero al menos a los que disfrutáis con este tipo de historias). Son pocas las sagas que consiguen despertar tanto entusiasmo en mí; es más, diría que Vampire Academy y Los Juegos del Hambre son las únicas que me parecen dignas de una matrícula de honor, cada una en su estilo. Y sin más preámbulos, paso a hablaros de Spirit bound (algo así como Atados por el espíritu, ya que este elemento tiene mucha importancia en la saga).
El día que lo empecé leí ochenta páginas del tirón (y porque tenía que dormir, que si no…). Con esto ya digo que es sumamente adictivo, incluso más que los anteriores (para mí). Unos de los aspectos que contribuyen a dotar la novela de un ritmo tan intenso son las numerosas escenas de acción y los giros inesperados que se producen de principio a fin. Me he alegrado de que por una vez Richelle Mead no haya concentrado toda la acción importante en la recta final; aquí la encontramos repartida por todo el libro e incluso diría que la primera mitad es más intensa en este aspecto que la segunda. Mientras leía no dejaba de imaginarme la saga convertida en película, o mejor aún, en serie: si se hiciera un buen trabajo, las escenas en la pantalla podrían tener muchísima fuerza.
Ya que he sacado el tema de no concentrar toda la acción en la recta final, he de decir que en este libro la autora me ha dado en las narices con las escasas críticas que le había hecho antes: además de repartir las aventuras y de este modo sorprendernos más, POR FIN ha dejado de recordarnos cómo son las especies de vampiros que aparecen y los sucesos que acontecieron en los primeros libros. De verdad que era un horror leer esos párrafos en el tercer y el cuarto libro, cuando el lector conoce de sobra cómo son los personajes.
La novela alterna acción y amor, como siempre. De lo primero ya he dicho que es la caña y engancha como una droga, dos cosas que se pueden aplicar también a la vertiente romántica. La historia gana muchos puntos por tener una protagonista fuerte cuyas preocupaciones no giran siempre en torno al amor, con lo que se tratan muchos temas de interés diversos. Hay que decir que esta saga no es nada empalagosa, así que no os dejéis llevar por las sensaciones que puedan transmitiros las portadas.
Los personajes, como de costumbre, son muy cercanos al lector y sus personalidades están definidas perfectamente: Rose, fuerza y pasión en estado puro; Adrian —que tiene más protagonismo que nunca— con su carácter simpático y sus bromas; Lissa, con su inteligencia y su inseguridad; Christian, valiente y determinado —para mí siempre ha estado a la altura de los dos chicos principales—; y Dimitri… ¡Ay, Dimitri! En Spirit bound nos vuelve a dar alguna sorpresa que no tiene desperdicio ;-) También merecen una mención todo el elenco de secundarios de la corte y viejos conocidos que aparecen de nuevo. Su presencia en la historia es menor, pero dejan su huella y no están ahí de relleno como sucede en tantos libros.
Toda la novela está perfectamente estructurada, con tramas bien hiladas entre sí y datos que se descubren en los momentos adecuados. Más allá de la acción y de las relaciones entre personajes, la autora ha hecho una gran labor al construir un mundo fantástico lleno de recovecos en los que indagar y con una institución política que da mucho juego en los últimos libros (y me atrevo a aventurar que todavía dará que hablar en el spin-off). Insisto: Vampire Academy es mucho más que un amor imposible y las cuatro luchas tontas de turno; aquí se abarcan muchos temas, la serie al completo está muy elaborada y en conjunto me parece más madura que la mayoría de series similares. Aun a riesgo de que me pongáis ejemplos del lado opuesto, pienso que si Richelle Mead puede ser escritora a tiempo completo es porque realmente tiene talento para esto y supera con mucho a todas las autoras que han surgido a raíz de esta moda (y a todo esto, ella ya escribía fantasía urbana antes del boom).
En relación con lo anterior, el estilo de la novela es ágil, con diálogos espléndidos y unos finales de capítulo danbrownescos que prácticamente te obligan a seguir leyendo sin parar. También tiene sentido del humor, aunque no del mismo tipo que en los primeros libros porque Rose ha madurado y no es tan cabra loca como antes. Veis, aquí tenemos otra ventaja: los personajes evolucionan, siempre de forma creíble y a su debido tiempo. ¡No acabaría nunca de enumerar todos los puntos positivos que le veo!
Aunque pasado un tiempo recordaremos el libro (y la saga en general) por los giros más inesperados y las escenas fuertes, se puede decir que la autora sabe entretenerte por el camino con escenas que dan forma y credibilidad a lo que viene después, construye toda una sociedad pasito a pasito (hecho que tiene muchísimo mérito, sobre todo cuando hablamos de un libro de quinientas páginas). Crescendo (Becca Fitzpatrick), por ejemplo, que fue el pringado que leí después de este, tenía alguna escena de acción interesante pero se me hizo pesadísimo porque el principio era más de lo mismo y había mucho relleno que no aportaba nada. En este sentido, a Spirit bound no le sobra ni le falta nada.
Cuando parecía que no habría traca en el desenlace porque lo “gordo” había ocurrido antes, ocurre algo que te deja con la boca abierta. ¡Menudo giro final! No es una traca del estilo de los libros anteriores porque, como digo, no se describen peleas y acciones fuertes al uso, pero quizá precisamente por salirse de lo habitual sorprende más y es más impactante (yo no me lo esperaba para nada). Por cierto, acompaño en el sentimiento a quienes tuvieron que esperar unos meses para leer el último :-P
En definitiva, Vampire Academy es la caña en todos los sentidos. Una saga tremenda; a lo largo de la lectura no dejaba de soltar “¡uf!”, “¡Dios!”, “¡ay!”, “OMG” y expresiones similares. Probablemente ese su punto más favorable, esa capacidad para hacerte sentir cosas mientras lo lees, algo que no siempre se encuentra en este género (soy la primera que considera que muchas sagas son entretenimiento y punto, literatura de usar y tirar). Si alguien pensaba que por ser el quinto bajaría el nivel, se equivoca: Richelle Mead tiene cada historia perfectamente planificada cuando la empieza a escribir, así que no aprovecha el tirón ni se le va la olla como a otras (ay, ese Amanecer…). Visualizo los seis libros como una escalera, cada uno en un peldaño superior al anterior. La bola se hace grande a medida que avanzas y Spirit bound te deja con los nervios a flor de piel. Dan ganas de coger el último y no parar…
1. Vampire Academy
2. Sangre azul
3. Bendecida por la sombra
4. Blood promise
5. Spirit bound
6. Last sacrifice
Enlaces de interés:
Facebook oficial de VA España
Web de Richelle Mead
Mi valoración: 10/10
Lastima que a mi pais tal vez la saga no llegue o demore años! y.y
ResponderEliminarmuy buena reseña!
un beso!
OH! me encantaria leer esta saga, pero en mi pais no está. Que envidia (de la buena ^^)
ResponderEliminarBeso!
Ya te imagino ahí leyendo 80 páginas del tirón y pensando que tenías que dormir. Es que esto del sueño quita mucho tiempo, jaja.
ResponderEliminar@Liz, Nina. ¡Qué pena que no lo podáis leer! Es muy bueno.
ResponderEliminar@Espe. Je, je, pocos libros me han enganchado tanto como este :)
Desbordas entusiasmo en tu reseña xD
ResponderEliminarMadre mía a mí el final me dejó tan estupefacta que me pasé un rato dándole al botón del ereader pensando que mi archivo estaba dañado. Me parecía imposible que realmente me hubiera dejado ahí con la palabra en la boca. Esta mujer tiene verdadero arte para los cliffhangers
Por mi ciudad no los he visto y no sos la primera que me los recomienda.
ResponderEliminarTendré que recurrir a otros medios.
Besos.
No puedo decir, más que estoy de acuerdo :P una saga muy recomendable. Yo estoy en espera de Bloodlines, que seguro también será muy buena! :)
ResponderEliminar@Elwen. Ja, ja, yo también me quedé un poco tocada con ese final, aunque al tener "Last sacrifice" en casa no llegué a disgustarme.
ResponderEliminar@Luciana. Claro, a las malas siempre queda Internet ;)
@Valkiria. ¡Sí! ¡Qué ganas de que llegue! :)
Rose y Dimitri lo hacen?
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