
Páginas: 280
ISBN: 9788420406398
Precio: 17,50€

Esta novela me llegó muy adentró, me obsesionó mientras duró la lectura y me hizo reflexionar acerca de lo poco que conocemos en realidad a aquellos colegas de Internet con los que compartimos aficiones. Porque podemos saber cosas sobre sus gustos, pero ¿qué hay del lenguaje no verbal y los numerosos equívocos que se pueden producir por una mala interpretación de un escrito? Daniel Glattauer retrató la situación con destreza y grandes dosis de realismo, sin caer en lo ñoño y fácil. Mis sensaciones fueron tan positivas que a los pocos días de terminarlo me lancé a por la segunda parte, Cada siete olas, de la que había leído opiniones tan o más positivas que las del libro anterior.
Cada siete olas
Aviso:
No voy a revelar spoilers de Contra el viento del norte, pero, dado lo fácil que resulta deducir a qué me refiero, os aconsejo que si aún no habéis leído el primer libro (y tenéis la intención de hacerlo) paséis directamente a la conclusión para no sospechar nada.
No voy a revelar spoilers de Contra el viento del norte, pero, dado lo fácil que resulta deducir a qué me refiero, os aconsejo que si aún no habéis leído el primer libro (y tenéis la intención de hacerlo) paséis directamente a la conclusión para no sospechar nada.
En Contra el viento del norte quedó algo pendiente entre Emmi y Leo y Cada siete olas les da la oportunidad de llevarlo a cabo. Sin embargo, ha pasado casi un año desde su último contacto y las cosas no son como antes para ninguno de los dos: Leo ha conocido a una chica en Boston y tiene la intención de ir en serio con ella; Emmi, por su parte, sigue adelante con ese falso matrimonio feliz que cada día cojea por más lados. De todas formas, en un aspecto han avanzado: hay confianza y los dos intercambian mensajes sobre su vida personal con más facilidad, sin ese empeño en ocultarla que tenían en el primer libro. En esas circunstancias, se atreven a dar el gran paso… y no solo una vez.

Al igual que en la novela anterior, el título hace una metáfora relacionada con la historia. Hay una teoría que dice que las seis primeras olas del mar llegan tranquilas, iguales e inalterables; ahora bien, a veces la séptima rompe y lo cambia todo. De nuevo, lo considero un título un poco forzado, preferiría algo que reflejara el contenido de correos electrónicos que hay en el interior (desde mi punto de vista, el rasgo más característico de estos dos libros).
Estilo
De nuevo, el texto está formado íntegramente por mensajes de correo electrónico. Es el distintivo de esta pequeña serie, el toque original del autor. No obstante, en esta ocasión no puedo alabarlo tanto como en Contra el viento del norte: como Emmi y Leo se conocen más, sus comentarios son más largos y sentimentales, con lo que engancha menos e incluso se me ha hecho pesado en algunos momentos. Además, al contarse tantas cosas sin rodeos, la gracia de leer entre líneas e intentar adivinar qué se trae cada uno disminuye. Hay menos emoción, me parece un libro más fácil (en todos los sentidos) que el primero. Aun así, no se puede negar que Daniel Glattauer escribe bien y, aunque la evolución de la trama no me haya convencido del todo, sus palabras están escogidas con el mismo buen gusto que en su gran éxito.
Impresiones

Pero empecemos por lo bueno, que esas más de doscientas páginas dan para algo más que esa controvertida resolución. La ventaja de cualquier serie de libros (planeada o no, ahora dejemos el tema) es que a medida que avanza conocemos mejor a los personajes. En efecto, el autor se explaya a la hora de retratar su psicología y nos encontramos con Emmi y Leo un poco cambiados: ella empieza al borde de un ataque de nervios (y no es para menos), pero se va calmando poco a poco; él sigue correcto, comedido en sus palabras, solo se deja llevar cuando toma sus copitas de vino (qué cansada he acabado de este recurso, por cierto). En ese sentido, el libro es más intenso, no pasamos por la fase de la primera toma de contacto y desde el principio volvemos a sentir la tensión que impregnaba las últimas páginas de Contra el viento del norte.

El otro inconveniente de Cada siete olas se relaciona directamente con el punto que acabo de comentar: la situación recreada no se identifica tanto con la realidad del lector (recordemos que la de Contra el viento del norte era más común: dos personas se conocen por Internet y se hacen gracia aunque saben que hay muchos obstáculos por el camino), ya no nos hace pensar en las particularidades de relacionarse con gente a través de este medio. Lo de ahora no es que sea inverosímil, sino que se trata de una historia más convencional, por mucho que esté contada mediante e-mails. En eso no negaré que Daniel Glattauer es un maestro: refleja varios problemas típicos de las relaciones de pareja a la perfección. Por un lado, el matrimonio que hace aguas; por el otro, las fases y las dificultades de una relación a distancia, entre otros temas que no quiero revelar. Si solo valorara el terreno sentimental, se llevaría un diez.

A pesar de todo, lo que marca de verdad si el libro te ha convencido es su final. O te gusta o no te gusta nada. En mi opinión de Contra el viento del norte os dije que no podía opinar sobre el desenlace porque lo leí con la seguridad de que había una segunda entrega y aquello no iba a acabar así, por lo que no era capaz de juzgarlo. Ahora rectifico: si valoro cada libro por separado, me quedo sin lugar a dudas con el primero y su desenlace, mucho más impactante y redondo. Si no fuera por las críticas que dicen lo contrario, me atrevería a aventurar que si te gustó el final de Contra el viento del norte, no te gustará el de Cada siete olas, y viceversa. Es aquello de las diferentes formas de ver la vida que os comentaba unos párrafos más arriba.
Conclusión

Enlaces de interés:
Web de Daniel Glattauer
Mi valoración: 6/10
Hay muchos lectores que piensan como tú, pero tengo que decir que a mí me gustó mucho. Yo considero las dos obras un libro entero :-) Y eso que tuve que esperar 4 meses a que saliese la segunda parte... yo lo vi muy en la línea del primero, si bien es verdad el final de contra el viento es mucho más original, y menos predecible... a mí, de vez en cuando, me gustan los finales felices de toda la vida, jeje. Un abrazo!
ResponderEliminarPues a mi el primero me pareció que ya lo daba demasiadas vueltas, dilatando un final cerrado que concluyera con una simple decisión la vida de estas dos personas. Nadie puede mantener tanto tiempo su vida en un paréntesis.
ResponderEliminarNo creo que toque el segundo.
Un abrazo
Yo ya te dije que éste me había gustado tanto o más que el primero. Será que me gustan los finales felices!
ResponderEliminarBesos
Tengo ganas de leer estos libros, el autor me gusta mucho como escribe y la historia pinta bien.
ResponderEliminarBesos
Totalmente de acuerdo con todo lo que dices. A mí también me decepcionó este segundo libro. Me pareció un final tan bueno el de la primera parte que me parece innecesario esta segunda parte. Eso sí, Glattauer muestra un total dominio del lenguaje. Se lee muy fácilmente esta segunda novela, aunque pierda el encanto de la primera.
ResponderEliminarBesotes!!!
jo, a mi "contra el viento del norte" me encanto!!!! que deliciosa lectura. en cambio, "cada siete olas" me sobro tantisimo... me quedo con el primero, ese final estaba genial! ^^
ResponderEliminarmuy buen comentario*
Estoy completamente de acuerdo =)
ResponderEliminarAunque la verdad es que me gustó mucho más de lo que me esperaba (ya que el primero me pareció un cierre redondo).
Besotes
no he leido ninguno de los dos, veo que no era necesaria esta parte!
ResponderEliminarpues que mal que te decepciono u.u
ResponderEliminarbesos!
A mí el primero me encantó y este sin embargo me decepcionó un poco
ResponderEliminarSentí pura magia leyendo "contra el viento del norte" Podría dar un mollón de razones para seguir releyéndolo de vez en cuando...
Eliminarsutil, original, elegante, tierno, sin cursilerías...
@Todos. Veo que hay dos corrientes de opinión claras, la de los que sí disfrutan del segundo y la de los que pensamos que con el primero fue más que suficiente. A ver con qué nos sorprende el autor en su próxima novela :)
ResponderEliminarOpino como tú, pero las leí ambas, la segunda porque quería saber cómo acababa la historia.
ResponderEliminar@Malén. Creo que todos nos sentimos igual al terminar el primer libro. ¡Dan ganas de seguir con la historia! :)
ResponderEliminarEste comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.
ResponderEliminarMe dan ganas de leer los dos libros la verdad. Yo leí "siempre tuyo" de este autor, para mi gusto muy recomendable. Acababa de leer "Vestido de novia" de Pierre Lemaitre y quería algo romántico, alegre para quitar la sensación de agobio del anterior...pues sí que elegí bien! No diré más al respecto. A mi me gustó.
ResponderEliminarPor favor alguien que me diga donde puedo descargarlo. Quiero saber cómo termina todo esto.
ResponderEliminarLa historia de amor más original que he leído nunca. Y además yo viví una historia idéntica. Inolvidable!!
ResponderEliminarEn cuanto a la secuela, nunca quise romper el encanto, arriesgarme a ello,
de salir decepcionado.