23 febrero 2011

Luna - Julie Anne Peters

Editorial: Little, Brown
Páginas: 250
ISBN: 9780316011273
Precio: 5,57€ en Bookdepository

Hablemos de… La transexualidad

Por alguna extraña razón, hay temas completamente olvidados dentro de la literatura juvenil (y me atrevo a decir lo mismo a nivel general). Entre los libros realistas sé por experiencia que los hay sobre todo tipo de conflictos y situaciones difíciles (enfermedades, abusos sexuales, adopciones, malos tratos, racismo, drogas, embarazos no deseados, etc.), pero se olvidan de una: la transexualidad, el proceso de reasignación de sexo y la lucha de estas personas para ser aceptadas por los demás. Durante mi adolescencia me empapé de novelas realistas muy variadas, pero me faltaba este tema y, aunque ahora mismo lo único juvenil que leo son historias fantásticas, decidí hacer una excepción porque este libro prometía. La pena es que he tenido que buscar en el mercado anglosajón porque en España parece imposible encontrar obras de esta temática. Quizá el realismo no llama tanto la atención como lo paranormal (sobre todo entre gente joven), pero también hay que pensar que no todos los adolescentes son lectores de literatura comercial y con una mínima campaña de promoción no costaría nada dar a conocer un relato de características diferentes.

Con la homosexualidad ocurre algo parecido, aunque en este caso mi crítica va a ir más allá: libros de un muchacho homosexual que debe hacer frente a los prejuicios de los macarras de turno los hay, pero estamos en el siglo XXI y echo de menos historias en las que ser gay o lesbiana se trate con naturalidad, es decir, que si por ejemplo la trama va de amor o aventuras, su orientación sexual no se anteponga a todo lo demás y el protagonista esté orgulloso de ser como es (soy consciente de que todavía hay gente homófoba, pero creo que los libros se centran demasiado en el lado dramático y duro en lugar de plasmar el tema con normalidad). Además, tanto en lo juvenil como en lo adulto se abusa de tópicos cuando estos personajes son secundarios: el chico gay con pluma, la chica lesbiana peluda y basta. Y ya no digo nada de libros fantásticos, ahí se tienen que alinear los planetas para encontrar un protagonista homosexual.

Así pues, hago dos peticiones: por un lado más historias sobre transexuales (dramáticas o de otros estilos, pero que las haya), y por el otro novelas protagonizadas por homosexuales (de todos los géneros, fantasía y ciencia ficción incluidas) en las que su orientación sexual no se vea como algo trágico y el chico o la chica haga su vida normal como los protagonistas heterosexuales. Seguramente ahora alguien comentará que sí que hay libros como los que pido e incluso me pondrá algún ejemplo, pero mi protesta viene porque esta temática se encuentra relegada a un tercer plano y valdría la pena que desde el mercado editorial se la apoyara más porque, repito, tienen su público (y no necesariamente personas que se identifiquen con ellos, pues creo firmemente que cualquiera puede disfrutar de estas historias).

Julie Anne Peters

Julie Anne Peters (1952) es una escritora americana de literatura infantil y juvenil. Se graduó en Educación con una mención en Francés y durante un año ejerció como maestra en un centro escolar, hasta que la despidieron y tuvo que pasar por una de las etapas más difíciles de su vida: reconocer que la enseñanza no era la profesión más adecuada para ella. Peters cambió de rumbo y se pasó a Informática, estudios que le permitieron trabajar como programadora, ingeniera de sistemas y analista a lo largo de los diez años siguientes a su graduación. No obstante, pasado este tiempo todavía no estaba convencida con su empleo y así fue como empezó a escribir. Según ella misma dice, escribe libros para niños y jóvenes porque le recuerdan a la época en la que sus decisiones marcaron lo que sería ella en el futuro, antes de fallar dos veces a la hora de determinar su vocación. En la actualidad ya tiene diecisiete libros a sus espaldas (ninguno de ellos traducido a nuestro idioma) y reconoce que, a pesar de estar todo el día en casa, su mente está llena de historias apasionantes y disfruta enormemente con su trabajo.

Sinopsis

Liam siempre ha preferido juntarse con chicas y de pequeño pedía a su hermana Regan que le dejara ser la mamá en sus juegos infantiles. Ahora, a punto de cumplir los dieciocho años, se viste de mujer cada noche en la habitación de Regan y pide a esta que le llame Luna (la ‘chica’ que solo sale por la noche). Regan sabe perfectamente que tiene una hermana y no un hermano, pero la mejor amiga de Liam todavía sueña con casarse con él y el padre está empeñado en colocarlo en el equipo de béisbol. Ante esa perspectiva, Luna sufre atrapada en un cuerpo equivocado, se ve obligada a hacer un papel delante de los demás y solo cuenta con la comprensión de su hermana pequeña. Desea liberarse, pero dar el paso es complicado…

Por otra parte, Regan siempre se ha sentido invisible. Gran parte de ello se debe al hecho de tener que guardar el secreto de Liam: una persona no puede vivir tranquila y hacer amistades mientras oculta algo tan serio porque tarde o temprano llegan las preguntas que no es capaz de responder. Ahora se limita a ir a clase y a trabajar como canguro de los hijos de una pareja bastante moderna a la que Regan envidia. No obstante, todo empieza a cambiar cuando llega un chico nuevo al colegio. En esta historia, Regan descubrirá que ayudar a una persona querida no siempre es fácil, como tampoco lo es aprender a confiar en alguien y discernir lo que te conviene de lo que no. Un relato humano, realista y llena de aprendizajes sobre la vida.

Impresiones

Normalmente, cuando pensamos en transexualidad nos vienen a la cabeza retazos de entrevistas en las que los susodichos contaban que desde pequeños se les notó porque el día de Reyes miraban con envidia los regalos de su hermano del sexo opuesto. En el libro hay flashbacks referentes a esto mismo, pero mucho más: cómo empezó Liam/Luna a informarse sobre la reasignación de sexo, cambios de actitud en diferentes periodos de su vida, admiración por famosos transexuales, etc. Me ha parecido una historia enriquecedora y bien hilada; no cae en los tópicos sobre transexuales, sino que te adentra en la vida de esta joven para conocer de una forma realista y cercana su sufrimiento y su camino hacia la liberación. El tema se trata con verdadera maestría y buen gusto, de una forma cercana al lector y con un nivel de profundidad que lo hace apto para todas las edades a pesar de estar catalogado como juvenil.

Al contrario de lo que puede parecer, la novela está narrada desde el punto de vista de la hermana, una apuesta que puede parecer extraña en un libro de esta temática pero que sin embargo me ha gustado mucho: por un lado, porque permite abarcar más tramas y conocer los sentimientos de alguien cercano (no olvidemos que cuando sucede algo malo los seres queridos también sufren); por el otro, porque se evita el dramatismo que tendría una primera persona de Liam/Luna, ya que en su estado pasa por momentos de hundimiento total que podrían dar un aura negativa a la novela. Otro recurso que destacar son los saltos al pasado, muy bien intercalados e indispensables para comprender mejor la situación y conocer cómo se hizo visible que Liam no era un niño corriente.

Liam/Luna y Regan son los dos protagonistas absolutos del libro: ambos están perfectamente caracterizados y tienen una evolución creíble y muy bien planteada. Probablemente las circunstancias de Liam/Luna son más llamativas de cara al lector y las más difíciles de plasmar para un escritor, pero Regan tampoco tiene desperdicio: pese a ser una adolescente normal y corriente, sin ninguna fe en sí misma, a medida que transcurre la historia aprende a hacer frente a las dificultades y descubre que no tiene ningún motivo para vivir con la cabeza agachada. Se nota que Peters tiene experiencia con este tipo de obras, ya que conoce perfectamente las dudas de una chica de esta edad y sabe plasmarlas sobre el papel de la mejor forma posible.

A pesar de las maravillas que os cuento, sé que a muchos esta temática no os llamará la atención y tal vez me diréis que no os apetece una lectura tan dura. En este aspecto, debo deciros todo se narra con naturalidad, sin caer en dramatismos. La prosa es de lo más amena y en ningún momento me he sentido mal por lo que leía. Al contrario: además del hilo principal, hay numerosas tramas paralelas sobre la importancia de sentirse realizado como persona. Es más, me atrevo a decir que ese es el verdadero mensaje del libro: en el caso de Luna resulta evidente qué necesita para sentirse completa, pero cualquier persona tiene metas y en la novela se habla de la necesidad de luchar por lo que queremos.

El desenlace me ha parecido la mejor opción posible: ni un final idealizado, ni un dramón. Peters opta por una situación creíble que pone punto y final a una historia estupenda, con las tramas perfectamente enlazadas y un tratamiento cuidado y profundo de la psicología de cada personaje. Me ha gustado mucho, muchísimo; solo hace falta ver la calificación que le doy. Por lo que he podido averiguar, la autora suele escribir sobre adolescentes que pasan por situaciones difíciles, así que habrá que seguirle la pista.

¿Recomendaría su traducción?

Totalmente
. En la literatura de nuestro país hacen falta más novelas como esta, historias que no dejan indiferente al lector y aportan algo más que simple entretenimiento. Además, en este caso en particular, el tema que se trata no está nada extendido en España, por lo que todavía me parece más interesante y necesario traducirlo (y si no es Luna, que sea otro del mismo tipo, aunque dudo que haya muchos libros que plasmen tan bien la vida y el conflicto de un adolescente que ha nacido en el cuerpo equivocado). En lo referente al lector, puede que de entrada esta temática no resulte tan llamativa como el romance fantástico de turno, pero insisto en lo que he comentado al principio: los lectores leemos lo que nos dan (y más en el panorama juvenil), si nos dan fantasía, leemos fantasía, si nos dan distopías, leemos distopías… Las campañas de marketing hacen mucho, ¿por qué no se podrían hacer con un libro distinto? Por si hacen falta más razones para darle una oportunidad, Luna fue finalista de los National Book Awards y en mi ejemplar se incluyen unas preguntas para reflexionar sobre el contenido que a todas luces se han hecho pensando en una lectura obligatoria. Si el libro se ha leído o se lee en colegios, difícilmente será un pestiño.

Conclusión

Maravilloso. Ha cumplido mis expectativas con creces: no solo no defrauda en absoluto en todo lo referente a la transexualidad, sino que además incorpora tramas sobre la importancia de sentirse realizado, un mensaje indispensable para cualquier persona de cualquier edad. Es de aquellas novelas que te implican en su historia y no dejan indiferente a nadie. Sé que para los que me leéis habrá un gran problema, y es que al no estar traducido al castellano su público objetivo se reduce y a eso tenemos que añadir la pereza o la desconfianza que supone comprar en internet para muchos. A pesar de todo, si soléis leer en este idioma y no tenéis prejuicios hacia lo juvenil, os animo a comprarlo: con cuatro clicks y 5€ lo tendréis. Por último, quiero animar a los jóvenes a no tener prejuicios hacia los libros realistas, traten el tema que traten: son libros fabulosos que en cuestión de entretenimiento no tienen nada que envidiar a la fantasía y la ciencia ficción. Cuando el autor es bueno, sabe atraparte en la trama y por lo general su historia llega muy adentro y aporta algo al lector (que a mi modo de ver es el fin principal de cualquier obra literaria). Me apena que a menudo estos libros pasen desapercibidos y la gente piense que son aburridos porque para nada es así. En fin, yo ya he puesto mi granito de arena para convenceros; ahora os toca a vosotros tomar una decisión.

Enlaces de interés:

Web de Julie Anne Peters

Compra el libro en Bookdepository.


Mi valoración: 9/10

7 comentarios :

  1. A ver si lo traducen y lo traen a España. Hay que tratar estos temas con naturalidad, claro que sí.

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  2. Desde luego, no es un tema que se suela tocar en literatura...

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  3. Totalmente de acuerdo con eso de que un libro tiene que aportarte algo como lector.

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  4. lastima que yo no lea en ingles, porque mi conocimiento del idioma es más que rudimentario, porque seguro que me gustaria

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  5. Si lo publicaran en España seguro que lo leería, pues coincido contigo en que es un tema poco tratado y me ha gustado lo que nos cuentas de esta novela.
    Un beso.

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  6. A mi me encanta la fantasía y lo paranormal, pero un buen libro de temáticas realistas me encanta. Especialmente (parezco masoca xD) si es muy realista, en el sentido de duro. No he leído sobre este tema pero me interesa. Los jóvenes deberían leer cosas de este estilo, cuanto antes se familiaricen, aprendan, antes podrán comprender ciertas cosas y no dejarse llevar por los prejuicios.

    Lástima que yo no sepa tanto inglés... O sí. Tengo pensado comprarme un libro en inglés para ir practicando, la verdad.
    Aunque algo menos serio, me temo.

    Gracias por la reseña.

    PD: sí, me ha dado por pasarme por más entradas. Llevo tanto tiempo con esto olvidado :.(

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  7. @La hechicera del narguile. Estoy contigo, este tipo de libros pueden inculcar muy buenos valores a los chavales. Por otro lado, me he sentido identificada contigo con lo de leer novelas realistas sobre temas duros, tuve mi época de empaparme de todo tipo de problemas y siempre eran lecturas que me aportaban mucho.

    Con respecto a leer en inglés, todo es empezar. Puedes probar con alguna cosa sencillita y a partir de ahí ir subiendo el nivel, a tu ritmo :).

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